Entradas

Mostrando las entradas de mayo, 2019

6.

Navego solo. El tiempo es un villano absurdo. Conversé con la sombra que goteaba desde un recuerdo opaco, indistinguible. Lo voy a encerrar en cada renglón, junto a tu nombre. ¿Cuánta oscuridad hay en la memoria? Tal vez, disfracemos nuestros recuerdos. Como un lugar seguro donde regresar cuando el mundo pesa demasiado y nosotros tan poco.

5.

El ego es un monstruo gigante, con un peso inimaginable pero con las piernas temblorosas, débiles. No puede sostenerse, y aunque intente, no puede avanzar. Simplemente debe permanecer quieto, inmóvil. Atado a su propio peso, ahuecado por el mismo. Insoportablemente vacío. Destinado a derrumbarse, a no trascender. 

4.

Mis parpados irán quedándose quietos, serán lentos, hasta no ser más que ausencia. Los ojos serán reflejos vacíos, sin recordarte cómo eran, tampoco te mirarán aunque eso parezca. Las manos serán de barro o de viento, los brazos perderán paulatinamente el movimiento. Los pasos serán calmos hasta no ser más que un murmullo, que de tan lejano, estará muerto. La voz se habrá perdido para entonces. Se habrá desgastado de repetir y repetir cientos, miles y millones de palabras. No habrá canto, no habrá leña, no habrá sangre. Entonces, en la hora más oscura, estaré muerto. Muerto hasta respirar de nuevo. Solamente hace falta respirar de nuevo.

3.

Mi amigo imaginario me ha revelado algo inquietante: Le han dicho que ya no debe hablar conmigo, porque no soy otra cosa que un engaño de su imaginación. Una proyección dentro de su mente, alguien que no está ahí, aunque éste así lo perciba. A mi me habían dicho lo mismo ya. Lo circular, eso aterra. 

2.

Qué tragedia moderna es la inmediatez. Parece que aquello que no es breve, es una carga. Ni la tristeza ni la alegría pueden permitirse más de un momento. Ni siquiera ésto. A prisa, vamos, que llegamos tarde. 

1.

¿Cuánto de lo que escondemos nos priva de encontrarnos? En este encierro, ¿Habita la esperanza? ¿O es parte, también, de la ausencia? Percibo como tragedia aquello que llaman tiempo, con rencor inocente. Hay un animal que, aún herido, insiste la vida, entre mis huesos y mis urgencias. La causa es el recuerdo, cárcel  de todos.